HAZTE UNO CON EL UNO

Pastor Guillermo Maldonado

La oración es un lugar de revelación, y la revelación nace de una relación con Dios. No es una fórmula, ¡es una experiencia! Cristo desarrolló Su ministerio a partir de Su identidad como Hijo de Dios y desde un lugar llamado “allí”.

La Relación Es Un Lugar:

1. La oración es un lugar de revelación. La revelación te activa para tener una experiencia con Dios. La oración se aprende sólo a través de la experiencia, no de una fórmula.

2. La oración es un lugar de poder. Sin Dios, nada podemos hacer.

“Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer”.

Juan 15:5

3. La oración es un lugar de milagros. Antes de que los milagros se manifiesten en el ámbito físico, van a un lugar llamado “oración”.

4. La oración es un lugar de recepción. Sin la oración, no puedes recibir nada.

“Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá”.

Marcos 11:24

Por lo tanto, todo lo que pidas en oración, cree que lo has recibido y será tuyo.

5. La oración es el lugar donde te haces uno con El Uno.

“Jesús le respondió: El primer mandamiento de todos es: Oye, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es”.

Marcos 2:29

Uno con el “Uno”

Deberíamos tener tal pasión por conocerlo íntimamente que cada día pidamos más de Él y menos de nosotros.

“Es necesario que él crezca, pero que yo mengüe”.

Juan 3:30

Hazte uno con el “Uno” porque tú estás en este mundo pero no eres de aquí.

“Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros”.

Juan 17:11

Independencia

El diablo tentó a Adán diciéndole que sería como Dios, pero él ya era como Dios. Conocer el bien y el mal significa “independencia”. Hay un espíritu en el ser humano que quiere hacer todo independientemente de Dios.

El diablo lucha contra la unidad. ¿Por qué? Porque la unidad trae bendiciones y abre puertas a mayores cosas en el Reino de Dios.

“Para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste”. Juan 17:21

Jesús quiere tener una relación con nosotros a través de la oración. Cuando dejas de orar, comienzas a asumir a Dios; empiezas a pensar que sabes lo que está bien y lo que está mal. No te apartes de Dios, que Él sea quien te guíe.

Uno que gobierna como Dios

Dios cambió el nombre de Jacob por Israel, que significa “Uno que gobierna como Dios”. Cuando te conviertes en uno con Aquel que gobierna, comienzas a gobernar como Dios. Él gobierna sobre la enfermedad, el pecado y los demonios. ¿Cómo te haces uno con El Uno? En un lugar llamado “allí”.

Cuando te haces uno con El Uno, tú ensayas, practicas el cielo en la tierra. A veces no puedes hacer ciertas cosas porque no las has practicado primero. Sólo en oración es que puedes hacerte uno con El Uno.

Como Dios, Hizo Dios, Al Hombre

“Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra”.

Génesis 1:26

Cuando entres al lugar de oración triste, deprimido y débil, saldrás gozoso, decidido y empoderado; porque cuando entras al lugar secreto llamado “allí”, te haces como Dios. Esto no significa que tú SEAS Dios, sino que vas a hablar, actuar y pensar COMO Dios.

No puedes moverte en lo sobrenatural sin hacerte uno con El Uno. Cuando te haces uno con El Uno, ya no sólo actúas y crees como Dios, sino que tu identidad viene de esa unidad. ¡Te haces invencible! Dios quiere levantar gente que no sea vencida por el pecado y el diablo.

“Sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal”.

Génesis 3:5

Cuando te haces uno con El Uno, todo lo que Él es y todo lo que Él tiene se hace tuyo.

“Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?”

Juan 14:9

Entonces, te haces uno con El Uno en el lugar llamado “allí”. ¿Estás dispuesto a hacerte uno con El Uno? Entra en ese lugar llamado “relación”, al lugar llamado “allí”.

¡Dondequiera que vayas, representa al Padre y manifiesta sanidades, maravillas y milagros! Dios te hizo como Él. ¡Levántate! ¡Entra al lugar llamado “allí” y comienza a gobernar como Él gobierna!